JUNTOS, EN COMUNIDAD, PLANTANDO VIDA

Reportaje a Viviana di Catarina y Natalia Soledad Proz

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“¿Por qué hace tanto calor en la escuela?” fue la pregunta con la que alumnxs de sexto de la Primaria  N° 21 de Exaltación de la Cruz, iniciaron el año pasado una investigación sobre el valor de los árboles. El trabajo llevó a realizar en el predio de la escuela un proyecto de reforestación con especies nativas y culminó en la presentación de un proyecto ante el Concejo Deliberante –aprobado por unanimidad como Ordenanza- para la plantación de nativas en los espacios públicos de la ciudad. Viviana di Catarina, en ese momento bibliotecaria, y Natalia Soledad Proz, maestra, relatan a Siete3siete este recorrido.

Siete3siete: ¿Cómo surge el proyecto de reforestación?

Viviana Di Catarina: Hasta el año pasado era la Bibliotecaria de la escuela; este año me jubilé. Nuestra escuela es nueva, de creación, se inauguró en el año 2016. En un espacio verde donde había árboles, los sacaron, limpiaron el terreno y construyeron la escuela. Pero no los volvieron a plantar. A fines del 2018 con Natalia empezamos a pensar en esta falta y habíamos dicho “hagamos como un bosquecito de árboles”. Y empezamos a plantar por nuestra cuenta unos árboles que nos habían traído algunos papás. En el verano del año pasado, por la ola de calor que había en toda la provincia de Buenos Aires, se suspendieron las clases. Y ahí surgió con lxs chicxs la pregunta: ¿por qué hace tanto calor en la escuela?

Natalia Proz: Decían, “porque no tiene aire acondicionado”, “porque la escuela es grande”. ¿Y cómo podríamos mitigar un poco este calor, ya que no tenemos plata para comprar aires?, yo repreguntaba. Cuando jugaban o salían a hacer una lectura, teníamos que buscar las sombras de las paredes de la escuela; pero igual sufríamos el calor, por la resolana que nos pegaba. Entonces lxs chicxs  empezaron a decir: “Seño, acá lo que hace falta son árboles”. Comenzamos a pensar en plantar. ¿Era cualquier árbol que podíamos plantar?, ¿cuáles resistían más el calor? Ahí comenzó toda la investigación. Vimos que, de los árboles que antes habíamos plantado, había un lapacho y un sen del campo. Investigando surgió que el lapacho no es nativo y el sen del campo sí es nativo. Y que los árboles nativos, se van a adaptar más a las condiciones de la eco-región donde estamos.

Siete3siete: ¿Cómo fue ese proceso de investigación?

V. D. C.: Desde Biblioteca, empezamos por buscar en el diccionario la palabra árbol y en enciclopedias y libros material sobre árboles. Ahí nos dimos cuenta que los libros traían árboles que no tenían que ver con nuestro lugar. Eran en base a una cultura más europea o, como son libros viejos, no hablaban de lo nuevo, menos de recuperar la flora nativa. Hicimos primero unos afiches para concientizar sobre qué nos traen los árboles -más oxígeno, más sombra, retienen el agua de la lluvia, etc.- y los pusimos por toda la escuela. Y algunos los enviamos afuera de la escuela, por ejemplo, al Jardín de enfrente. Empezamos a movernos con la comunidad, para que padres y madres también se estuvieran informando sobre este tema. Empezamos a alfabetizar con la conciencia ambiental, y a ver palabras que tenían que ver con nuestro proyecto de nativas.

Empezamos a movernos con la comunidad, para que padres y madres también se estuvieran informando sobre este tema. Empezamos a alfabetizar con la conciencia ambiental, y a ver palabras que tenían que ver con nuestro proyecto de nativas

N. P.: Empezamos a conocer las nativas de las distintas eco-regiones que tiene la provincia.  Luego salimos a hacer un sondeo, a ver, cerca de la escuela, que árboles había. Y ahí descubrimos que un 80% de los árboles son exóticos, que no dejan prosperar el crecimiento de las nativas. Y no era que a los exóticos los teníamos que talar, sino que hay que recuperar la flora nativa para recuperar también la fauna nativa. Y llegó la época de reforestación.

V. D. C.: Empezamos a pedir ayuda a la comunidad. Nos contactamos con la Municipalidad de Exaltación de la Cruz, que tiene un vivero municipal. Justo coincidió que la provincia de Buenos Aires estaba trabajando con el tema de ambiente y de reforestar nativas, y había un presupuesto para la adquisición de árboles nativos.

N. P.: Vinieron desde la parte de Ambiente de la Municipalidad a dar una charla a la escuela. Y también nos ofrecieron las visitas a los viveros de la zona donde aprendimos un poco más de nativas. A esa charla en la escuela nosotrxs invitamos a las familias, y la asistencia fue muy positiva. A partir de ahí empezaron a donar algunos arbolitos, y con lxs chicxs tuvimos que ver cuáles eran nativos y cuáles no.

V. D. C.: Como tuvimos que enviar una nota a la Municipalidad, lxs chicxs la trabajaron en prácticas de lenguaje. Porque el proyecto integró todas las áreas. Por ejemplo, tuvimos que pensar cuánto espacio va a ocupar ese árbol en un futuro; porque ahora es chiquito pero después el árbol crece. Así que hubo que calcular a qué distancia uno de otro había que plantar según el espacio que teníamos. O desde naturales, estudiar el cuidado del árbol una vez que se planta. Algo que se trabajó también con las familias fue lo de reducir nuestra huella de carbono, es decir cuál es la huella que deja ser humano en su paso por la tierra. Se interesaron un montón.

N. P.: Luego mandamos encuestas virtuales, para ver qué hacían en las casas para reducir la huella de carbono, qué acciones afectaban de manera positiva al ambiente y qué acciones negativas hacíamos. Cuando vinieron a reforestar, papás y mamás ya hablaban sobre las acciones negativas para el medio ambiente, que no reciclaban, etc.; es decir que sufrieron un impacto bastante fuerte sobre este tema de las acciones que afectan el entorno donde ellxs viven.

V. D. C: También nos pudimos  dar cuenta de que a veces hay acciones destructivas del medio ambiente por desconocimiento, más que por una acción de maldad hacia la tierra. Un ejemplo, precisamente, es que la gente desconoce para qué sirven los árboles. Algo tan sencillo como que un árbol favorece en un montón de cosas al ambiente y a nuestra vida, desde la sombra al oxígeno. Lxs adultxs desconocían eso. Y contaban que en la casa no tenía árboles por eso de que tener un árbol es molesto, hay que mantenerlo, en las tormentas las ramas se caen sobre los techos… Ahí salió la idea de que si se plantan árboles nativos, éstos, al adaptarse mejor al clima, son más resistentes a las tormentas, tienen una forma de crecimiento distinta, etc.

lxs nenxs investigaron sobre un insecticida natural a base de un hongo -el penicillium- que se encuentra en los frutos cítricos. Hay que dejar que la naranja o limón se pudra, juntar ese hongo y diluirlo en agua. Y se pusieron a fabricarlo. Hicieron casi 20 litros del insecticida natural y cuando tuvimos la muestra, estuvieron vendiendo su insecticida para poder comprar otros arbolitos

Siete3siete: ¿Y cómo fue la tarea de reforestación?

V.D.C.: Una vez que la Municipalidad nos dijo que íbamos a tener los árboles, empezamos a organizarnos, en torno a cómo los íbamos a plantar y cómo lo íbamos a cuidar, porque no solamente había que regarlos.

N. P.: Entonces, lxs nenxs investigaron sobre un insecticida natural a base de un hongo -el penicillium- que se encuentra en los frutos cítricos. Hay que dejar que la naranja o limón se pudra, juntar ese hongo y diluirlo en agua. Y se pusieron a fabricarlo. Hicieron casi 20 litros del insecticida natural y cuando tuvimos la muestra, estuvieron vendiendo su insecticida para poder comprar otros arbolitos.  También hicieron un tríptico -que estuvieron entregando a las familias y también fuera de la escuela- sobre la forma natural de conservar los árboles.

V.D.C: Cuando hablamos de hacer un insecticida natural, salió el tema de los agrotóxicos.  Vivimos en una zona que es fumigada por el cultivo de diferentes cereales, no solo de soja. Entonces salió esto de cuidar el ambiente sin contaminarlo y hacerlo en forma económica. Porque pareciera que la única forma de sacar a las hormigas es comprando un producto comercializado. En cambio, lo podemos hacer nosotrxs de una manera natural, incluso hasta generándonos un recurso económico.

N. V.:  Recibimos veinte arbolitos, había ejemplares de timbó, jacarandá, palo amarillo y guaran. Enfrente de la escuela, que es donde las familias esperan, y no hay árboles, ahí plantamos los jacarandáes y del lado del patio de lxs chicxs los demás. Las familias fueron invitadas a plantar.

V.D.C: Estuvo la gente de Medio Ambiente de la Municipalidad plantando con papás, mamás, nosotrxs y todxs lxs alumnxs de los grados; desde la una hasta las tres de la tarde trabajando. Justo nos tocó un día hermoso para hacerlo. Lxs chicxs estaban contentos porque vinieron del canal local y lxs estuvieron filmando e hicieron entrevistas a algunas mamás y papás sobre qué les había parecido la experiencia.

Siete2siete: Hermoso cierre del proyecto, ¿no?

V. D. C.: Bueno… pensábamos que el proyecto lo teníamos terminado, cuando dijimos: “estamos en los 40 años de la democracia”. Y ya que en sexto de Sociales se ve participación ciudadana y las intervenciones que uno como ciudadano puede hacer, se nos ocurrió trabajar en crear una Ordenanza dentro del Municipio para que en los lugares públicos -plazas o espacios de escuela- se empiecen a plantar nativas y no otro árbol; no pensar tanto en la belleza que a veces tienen otros árboles que no son nuestros y si más en nuestras propias bellezas. Decidimos contactamos con el presidente del Concejo de Deliberante para que venga a sexto grado a dar una charla. Otra vez trabajamos con palabras que lxs chicxs no utilizan, como concejo deliberante, la diferencia entre una ordenanza y una ley, el derecho a peticionar… Y se empezó a trabajar en la nota.

N. P.: Al principio lxs chicxs no estaban muy movilizadxs, decían “¿a nosotrxs quién nos va a hacer caso?”. Estuvimos casi dos semanas redactando borradores a ver cómo podíamos hacer la nota, cómo empieza, cómo me tengo que dirigir a una persona, y decían: “¿esto vale la pena seño”. Y el presidente del Concejo Deliberante avisó que venía. Quedaron sorprendidxs y empezamos a trabajar sobre las preguntas para una entrevista. Cuando vino le  hicieron la entrevista y le entregaron la petición. El se la llevó y a las dos semanas recibimos una notificación: que había sido aceptada la petición de Ordenanza y que se iba a tratar en el Concejo Deliberante y que nos invitaban a participar. Los chicxs estaban contentísimos. Ese día fuimos nosotras, acompañadas por la Vicedirectora, y lamentablemente pudieron ir poquitas familias, porque las sesiones son a las ocho de la noche y terminan muy tarde, y el Concejo Deliberante queda a 22 km de la escuela.

pensábamos que el proyecto lo teníamos terminado, cuando dijimos: “estamos en los 40 años de la democracia”. Y ya que en sexto de Sociales se ve participación ciudadana y las intervenciones que uno como ciudadano puede hacer, se nos ocurrió trabajar en crear una Ordenanza dentro del Municipio para que en los lugares públicos -plazas o espacios de escuela- se empiecen a plantar nativas y no otro árbol

N. P.: Se leyó la propuesta y fue aprobada por unanimidad. A las dos semanas nos enviaron la Ordenanza con las firmas. Los chicos estaban muy contentos.

V.D.C: Y terminamos trabajando con ellxs que se pueden peticionar cosas no solamente relacionadas con el cuidado de la naturaleza, pueden ser otras cosas que tengan que ver con una necesidad.

N. P.: Este año, el proyecto de reforestación se tomó como institucional, abarcando otras acciones que tienen con el cuidado del medio ambiente.

V. D. C.: Nosotras dos sentimos mucha satisfacción y felicidad por ese proyecto, porque nos costó llevar adelante la idea de que esto se podía hacer, que no era imposible hacerlo. Porque a veces uno siente como que no va a poder lograrlo, porque hay que hablar con muchas personas, coordinar muchas cosas. Y lo pudimos hacer. Se logró, y los árboles están vivos, sobrevivieron todo el verano y se siguen cuidando. Es muy gratificante cuando uno es docente, porque uno está en la escuela también para ir cambiando las realidades. Algo que parecía que no se podía, a través de la educación, a través del trabajo en conjunto, solidario, se puede lograr. Creemos que nuestra sociedad necesita eso, más trabajo en equipo, más trabajo colectivo, ser más comunidad y menos individualidad. Uno, solo, plantando un árbol, hace algo. Pero si somos muchos, juntos, plantando árboles, se hace muchísimo más.

Viviana Di Catarina
Natalia Soledad Proz

Viviana Di Catarina. Prof.de Enseñanza Primaria. Bibliotecaria de instituciones educativas. Secretaria de Educación de Suteba Exaltación. Ex bibliotecaria de E.P.21 de Los Cardales.

Natalia Soledad Proz. Docente en Educación Primaria. Capacitación en talleres de Biodiversidad Ambiental. Lugar de trabajo: Escuela Heroes de Malvinas N 21. Los cardales