“Todo proyecto de país está asociado a un proyecto de educación pública”, plantea Silvia Almazán. La Secretaria Adjunta de SUTEBA y Subsecretaria de Educación de CTERA analiza cómo en el actual proceso de desmantelamiento del Estado se intenta reformatear a la escuela pública subordinándola a los intereses de los sectores más concentrados del poder económico. “Por eso estamos en una lucha que es sindical, es política y es también una lucha pedagógica. La lucha sigue siendo hoy por la concreción de los sueños de nuestrxs pibxs”.
Siete3siete: ¿Cómo analizás el estado de la educación hoy?
Silvia Almazán: Para analizar la situación de la educación en Argentina es necesario considerar las reformas que se propone el Gobierno Nacional en la organización institucional democrática. Una, fundamental, es el desmantelamiento del Estado como generador de políticas y de financiamiento para garantizar derechos. Otra la atomización del sistema educativo en un contexto de ajuste brutal de la educación pública. Y la transferencia de responsabilidades y funciones del Estado nacional al ámbito privado. En ese proceso hay un ataque constante a lo público, a lo común y a nuestras conquistas históricas. Porque nuestra concepción como Nación y como País Federal es una conquista histórica; Memoria, Verdad y Justicia también es una construcción de nuestro pueblo, como lo son las recientes políticas de Géneros y Diversidades. Atacan a concepciones que interaccionan con las luchas de los movimientos populares hacia la construcción de lo que consideramos un mundo justo y solidario. El gobierno nacional incluso está cambiando posicionamientos históricos de la Argentina en política exterior, como el de multilateralidad, planteando una subordinación explícita a Estados Unidos, la OTAN e Israel.
Siete3siete: ¿Qué implica esta subordinación?
Silvia: Es subordinación a un sistema político social, económico y cultural que está generando pobreza, hambre, conflictos bélicos, migraciones y devastación ambiental. En este contexto donde Estados Unidos, en su disputa con China por la hegemonía mundial, avanza nuevamente sobre América Latina -a la que considera un espacio geopolítico importante para la defensa de sus intereses-, nos han encolumnado en un sector de los contendientes de la batalla cultural, que es a nivel mundial y se viene instalando desde fines de los 80, con el Consenso de Washington. Estamos ante la ofensiva de un neoliberalismo recargado que viene de la mano de concepciones fascistas o neofacistas, y que busca un desmantelamiento de los Estados Nación para que sean las grandes corporaciones quienes gobiernen y conduzcan los destinos de los pueblos. Siempre hemos defendido la idea de pensarnos en espacios de construcción de los pueblos que nos permitan soñar, diseñar y seguir luchando por construir ese mundo que sintetizamos como justo y solidario, y que en alguna oportunidad también nombrábamos como “un mundo en el que quepan muchos mundos”. Estas políticas dominantes hoy nos direccionan a un único mundo, a una única lectura sostenida en concepciones y miradas hiperindividualistas y sectoriales, de fragmentación social. Políticas que se vienen profundizando a partir de la preeminencia de gobiernos de derecha, y con una lucha desigual en el marco de gobiernos democráticos y populares en Latinoamérica, ya que son constantemente jaqueados por las corporaciones y las oligarquías locales que les imponen condicionamientos o generan todo el tiempo acciones destituyentes.
Siempre hemos defendido la idea de pensarnos en espacios de construcción de los pueblos que nos permitan soñar, diseñar y seguir luchando por construir ese mundo que sintetizamos como justo y solidario, y que en alguna oportunidad también nombrábamos como “un mundo en el que quepan muchos mundos”
Siete3siete: ¿Cómo se refleja esto en la educación?
Silvia: Hay una disputa por el sentido de la educación pública y por el derecho social a la educación -que implica la consecuente responsabilidad de los Estados como garantes- o si se integra la educación a la lógica del mercado y se convierte en un bien transable. Para los sectores más concentrados del poder económico, la educación es un arma vital para su batalla cultural, para la construcción de subjetividades neoliberales. Y es también una fabulosa plataforma de negocios, porque son varios billones de dólares los que circulan en torno de la educación a nivel mundial.
Siete3siete: ¿Y esto cómo se da en nuestro país?
Silvia: La educación pública siempre tuvo en la Argentina un lugar de responsabilidad en la construcción de lo solidario, lo común, el proyecto colectivo, la Nación, lo federal. Somos comunicadores de una cultura y de una lectura de nuestra historia, que es como un mandato de nuestro pueblo. Lxs docentes intentamos poner a disposición de todos, todas y todes les estudiantes, todos los conocimientos, todas las lecturas posibles, todas las miradas, todas las culturas para que sea posible construir un análisis crítico de esta realidad y de este tiempo histórico, y a la vez ir construyendo herramientas para transformar las injusticias y las desigualdades. Por eso, justamente, la escuela pública está puesta hoy en cuestionamiento por la derecha, porque se la quiere formatear como un dispositivo para comunicar un único pensamiento, y se proponen modificar los derechos docentes y la formación, precisan de docentes neoliberales para su objetivo político, necesitan disciplinarnos. Y por eso, además del desmantelamiento estatal, hay un brutal ajuste educativo del Gobierno Nacional.
Siete3siete: ¿Cómo se puede dimensionar este ajuste?
Silvia: El presupuesto 2024 dio continuidad al presupuesto de 2023 con una actualización insuficiente porque no consideró ni la devaluación del 108% ni el proceso inflacionario. Pero a su vez hubo una sub-ejecución de las partidas que llega aproximadamente al 60%. Y estamos en noviembre, ya terminando el año. No transfirieron a las provincias las partidas de los fondos educativos, de los programas para la formación docente, para el Servicio Alimentario, para políticas socioeducativas, para las becas para lxs estudiantes. Tampoco las partidas para infraestructura escolar; sólo en la provincia Buenos Aires quedaron ochenta escuelas paralizadas, algunas construidas en un 95%. Y finalmente, tampoco enviaron las partidas que tienen que ver con la responsabilidad que tiene el Estado Nacional sobre una cuota parte del salario de los y las docentes, que es el FONID. Recordemos que el FONID es una conquista de la lucha de la Carpa Blanca; desde fines de los 90 fueron cambiando los gobiernos, y si bien se discutió el monto nunca se suspendió el pago. Desde enero está suspendido y esto está representando una reducción salarial de casi un 20% para los y las docentes de todo el país. Otra expresión de este ajuste es el veto a la movilidad jubilatoria, que impacta en lxs docentes jubilados de diferentes provincias que tienen las cajas transferidas. Pero la provincia de Buenos Aires también está siendo afectada por el desfinanciamiento del ANSES, que no envía las partidas adeudadas al IPS.
se proponen modificar los derechos docentes y la formación, precisan de docentes neoliberales para su objetivo político, necesitan disciplinarnos. Y por eso, además del desmantelamiento estatal, hay un brutal ajuste educativo del Gobierno Nacional
Siete3siete: ¿Y cuál es el panorama para el año próximo?
Silvia: El presupuesto previsto para el 2025 establece la profundización del ajuste porque plantea la suspensión de artículos de la Ley de Educación Nacional que fijan un piso de inversión del 6% del producto bruto interno en términos de la conjunción de los Estados nacionales y provinciales. Y a su vez va a suspender la Ley de Financiamiento Educativo y también artículos de la Ley de Educación Técnico Profesional que plantean una inversión del 0,2% de los ingresos corrientes del presupuesto nacional. Si le sumamos a todo esto que también se va a suspender la ley que tiene que ver con la inversión en Ciencia y Tecnología -que tiene que llegar progresivamente al 1% en una serie de años- y la lucha por la defensa de la Universidad Pública, vemos que está en riesgo la educación pública en todos sus niveles y modalidades. Por otra parte, las políticas económicas nacionales están generando pobreza y desocupación, e impactan en nuestras comunidades educativas, que deben establecer prioridades familiares de supervivencia: comida o escuela o salud o un lugar para habitar. Requeriría por lo tanto de una mayor intervención estatal a través de políticas socioeducativas, políticas que el gobierno nacional está abandonando y que las provincias deben afrontar con los recursos que tienen.
Siete3siete: ¿Cómo se expresa esto en las provincias?
Silvia: Hay heterogeneidad, porque algunos gobiernos provinciales están tratando de reparar de alguna manera estas situaciones mientras que otros están profundizando el ajuste en sus propias provincias. Hay provincias en las que las Paritarias están siendo retaceadas y los aumentos salariales se dan por decreto, han producido modificaciones a los sistemas jubilatorios, hay ajustes en los presupuestos educativos. Se han producido grandes luchas frente a estas cuestiones. Podríamos mencionar a Santa Fe, Entre Ríos o Misiones; o lo que pasa en La Rioja, con la suspensión de las retenciones de los aportes a lxs docentes afiliadxs; o lo que pasa en Santa Cruz, que se ha multado a la organización sindical por la no aceptación de una conciliación del gobierno provincial. Por otra parte, hay gobiernos, como el de la provincia de Buenos Aires, que siguen sosteniendo, en los diferentes niveles y modalidades, programas que debe garantizar la Nación, además de sostener la periodicidad de las paritarias y la actualización salarial. Esto en el marco del ajuste que Nación nos impone a lxs bonaerenses, a lxs que nos adeuda 7,8 billones de pesos. Nación se propone límitar el desarrollo de las políticas públicas provinciales y esto afecta nuestros derechos. Por eso desde CTA T abordamos de manera prioritaria las cuestiones presupuestarias nacionales.
Siete3siete: ¿Qué hay detrás de todo este ajuste?
Silvia: Todo proyecto de país está asociado a un proyecto de educación pública. En particular, el ataque a la educación secundaria y a la educación superior va de la mano de un proyecto de desindustrialización. La apertura de las importaciones está produciendo lo que algunos denominan un “industricidio”, el quiebre de las Pymes y de otras empresas medianas y grandes, lo que está significando un alto porcentaje de despidos, suspensiones y reducciones salariales. Entonces, si vamos nuevamente, como sucedió con la Dictadura y los gobiernos neoliberales, a ser solo exportadores de materia prima, pierde sentido, para el que gobierna, la formación en relación con la investigación, la ciencia, la tecnología, y por lo tanto la educación superior y la educación secundaria. Estamos en una lucha sindical, porque están en juego nuestros derechos salariales y laborales, y es una lucha política porque está en juego el modelo de país. Pero también es una lucha pedagógica.
vemos que está en riesgo la educación pública en todos sus niveles y modalidades. Por otra parte, las políticas económicas nacionales están generando pobreza y desocupación, e impactan en nuestras comunidades educativas, que deben establecer prioridades familiares de supervivencia: comida o escuela o salud o un lugar para habitar
Siete3siete: ¿Podés profundizar en esto?
Silvia: A la par del ajuste y el desfinanciamiento, el Gobierno Nacional intenta llevar adelante políticas educativas que es necesario analizar con detenimiento. Primero, el haber devaluado o desvalorizado al Ministerio de Educación, transformándolo en una Secretaría que además depende de un Ministerio que llamaron “de Capital Humano”; ya ahí están marcando desde qué concepción están mirando la formación. Y desde esa concepción están avanzando en dos cuestiones: el denominado “Plan de alfabetización” y reformas en la formación docente inicial y continua. Para entender el sentido de estas reformas tenemos que retrotraernos al documento del Banco Mundial de 2014, “Profesores excelentes”. Parten del diagnóstico de que en América Latina se amplificó la escolarización en todos los niveles, es decir tienen que reconocer las legislaciones y políticas educativas que hubieron en esos primeros quince años del siglo. Mas luego ponen un “pero”. Dicen que hay un bajo desempeño de los estudiantes que tiene que ver con el desempeño de lxs docentes. En ese marco hay un discurso que ahora se ha potenciado, el de “catástrofe educativa”. Estaríamos en una situación educativa crítica generada por las concepciones de la Ley de Educación Nacional y de la Ley de Financiamiento Educativo. Entonces, todos los días hay un titular que dice que en la escuela pública no se enseña ni se aprende. Hacen una lectura tergiversada de los datos, y dicen que en la Argentina lxs alumnxs no leen o no comprenden lo que leen. Tergiversan los datos porque las evaluaciones dan que mayoritariamente los estudiantes están en la categoría “básica”, pero resulta que si uno lee los parámetros que conforman esa categoría se ve que supone un dominio sobre una multiplicidad muy importante de variables; de hecho la categoría que le sigue en la de “excelencia”. Esta idea de catástrofe educativa es parte de la narrativa del gobierno para instalar sus reformas. Que más que avanzar en modificar problemáticas o nuevas complejidades que son epocales y que nosotrxs también estamos investigando y para las que tenemos propuestas, lo que hacen es retrotraernos al siglo XX e incluso a fines del siglo XIX.
Siete3siete: ¿Es por esto que plantean ese Plan de Alfabetización?
Silvia: En el caso de la alfabetización hacen un negacionismo de las investigaciones producidas en la segunda parte del siglo XX sobre los procesos de aprendizaje y de enseñanza de la lectura y de la escritura. Investigaciones que han sido realizadas desde la perspectiva de la alfabetización como un derecho. Un derecho para la formación ciudadana, para leer y entender el mundo, pero también para leer y escribir nuestra propia historia desde una perspectiva de construcción colectiva. Ahora vuelven a querer formatear a las nuevas generaciones de docentes para que nos retrotraigamos a enseñar fonemas y grafemas aislados, que se aprenda a leer una equis cantidad de palabras sin que éstas estén en relación a un concepto, o por ejemplo, a la propia historia, a la historia de mi barrio, de mi país. Es decir, sin considerar la función social de la lectura y la escritura. También quieren impedir en otros grupos etáreos la lectura de variedad de textos, sobre los que también se intenta avanzar censurando, como en la etapa de la Dictadura.
Siete3siete: ¿Qué alcance tiene el reformateo de la formación docente?
Silvia: Está en línea con la visión tecnocrática de los organismos financieros internacionales, remixando las concepciones que conocimos en los 90, que ubicaban al trabajador como un objeto de las reformas y no como un sujeto que construye conocimiento pedagógico y escolar y, por ello, tiene que ser protagonista de las transformaciones para que éstas efectivamente se puedan llevar adelante. Por eso las organizaciones sindicales docentes no somos convocadas, en el marco de la Paritaria, al debate y a la construcción de propuestas. Tampoco en el marco el Consejo Federal de Educación, donde solo tenemos palabra. Se están haciendo reformas sin consultas, de espaldas de la lectura, el análisis y la lógica de las trabajadoras y trabajadores de la educación. Hay resoluciones aprobadas que plantean el “desarrollo de las capacidades”, algo que fue muy fuerte en los 90. Incluso la bibliografía vuelve a ser la de aquella etapa. No miran el trabajo docente como una producción colectiva, sino que vuelven a plantear la cuestión de que la calidad de los aprendizajes está relacionada a la calidad del docente. Es decir, sólo hay responsabilidades individuales, se habla de sujetos individuales que no interactúan colectivamente con sus estudiantes, con las comunidades educativas, con la cultura, con la historia, con los conocimientos de su tiempo histórico. Incluso en el proceso de formación docente se censuran lecturas sobre la historia, negando por ejemplo el protagonismo de los pueblos originarios –cuya presencia en este continente desde hace quince mil años ha sido demostrada por la investigación científica- e invisibilizando que el Estado Nacional se construyó sobre un genocidio a partir del cual muchxs de lxs que hoy están en el gobierno o en las corporaciones, portan los apellidos de quienes se apropiaron de la tierra de esos pueblos. Otra resolución que pone en alerta a la CTERA respecto a los derechos laborales docentes y de las propias instituciones educativas, es la creación de un Sistema Federal Integrado de Evaluación, Certificación y Acreditación de la Formación Docente –Sifieca- que va a poner en una situación de mucha complejidad las acreditaciones de los estudiantes de la educación superior. Desde aquel documento de 2014 del Banco Mundial, se han ido produciendo otros muchos que apuntan a nuevas direccionalidades para la educación pública desde una perspectiva de mercado, privatizadora. Por ejemplo “Docentes exitosos, estudiantes exitosos”. Y esto se expresa hoy en el acento que está poniendo el Gobierno Nacional en transferir responsabilidades y funciones, que son del Estado, a las fundaciones o al ámbito privado. Las orientaciones políticas de la secretaría de educación nacional provienen de la UCA y de las fundaciones afines al gobierno.
En el caso de la alfabetización hacen un negacionismo de las investigaciones producidas en la segunda parte del siglo XX sobre los procesos de aprendizaje y de enseñanza de la lectura y de la escritura. Investigaciones que han sido realizadas desde la perspectiva de la alfabetización como un derecho
Siete3siete: ¿Cómo llevar adelante esta lucha pedagógica?
Silvia: Para enfrentar todas estas modificaciones que se quieren hacer sobre las conquistas históricas que son derechos y políticas públicas, estamos llevando adelante desde Suteba y Ctera, un trabajo de análisis argumentativo y propositivo serio y responsable que aporte a una formación integral de las trabajadoras y trabajadores de la educación. Porque nuestras responsabilidades docentes se expresan en el proyecto áulico y en el proyecto institucional. Ahí comienza la centralidad de nuestra lucha pedagógica. Porque cuando se habla de catástrofe educativa, lo que se hace es borrar toda esa historia de construcción pedagógico didáctica y pedagógico política, que las y los docentes de todos los niveles y modalidades han hecho en la Argentina. Desde CTERA y SUTEBA trabajamos fuertemente para valorar toda esa lucha que se da en los distintos ámbitos educativos y en los diferentes contextos y territorialidades; experiencias y proyectos que son parte y dan dirección a las políticas que formulamos colectivamente. Forman parte de las luchas en defensa de la educación pública y del trabajo docente. Nacimos como organización sindical, CTERA a nivel nacional y como SUTEBA en lo Pcial., para transformar, para ser partes de la transformación de la educación en el sentido de la construcción de un proyecto de país solidario, justo, con independencia política, económica y justicia social, con soberanía educativa, cultural y científica. Vinimos para ser parte de las transformaciones sociales de nuestro pueblo y para aportar los conocimientos que son fundamentales para esos procesos.
Batalla a nivel mundial
CTERA, a través de la Internacional de la Educación, tuvo acceso a un reciente trabajo de las Naciones Unidas con Recomendaciones sobre la Profesión Docente que fuera encargado a un Comité de Expertos que integraron ex-presidentes y ex-ministros de educación de distintos países, representaciones de organizaciones sociales, sindicales y del mundo académico. Son Cincuenta y nueve recomendaciones que ponen el eje en que para poder avanzar en transformaciones sobre el trabajo docente y sobre la educación pública en relación a garantizar la famosa “calidad” tiene que haber una presencia fuerte de los Estados con financiamiento y con políticas públicas. Es decir, ese comité de expertos mundiales plantea las mismas cuestiones que en distintos lugares del planeta sostenemos las organizaciones sindicales docentes. Estas recomendaciones toman una multiplicidad de variables que hay que abordar: políticas de inclusión; políticas que garanticen los derechos de las mujeres, de las disidencias, de las y los migrantes, de las comunidades originarias; fortalecer las instituciones educativas y el trabajo docente; garantizar las condiciones para enseñar y las condiciones de aprendizaje. Y desde las Naciones Unidas se convoca a todos los gobiernos a adherir a las mismas. Esto es un fuerte aval a las batallas que en nuestro pais lxs docentes organizadxs estamos dando, por financiamiento educativo nacional y políticas públicas educativas. Y que seguiremos dando como siempre lo hemos hecho defendiendo y construyendo educación pública como política estatal y derecho social desde el aula, la escuela y la calle. Porque estamos convencidxs que cada vez que se abre la puerta de la escuela se ponen en movimiento los sueños de nuestro pueblo. La lucha sigue siendo hoy por la concreción de los sueños de nuestrxs pibxs.
Silvia Almazán, actualmente Secretaria General Adjunta del SUTEBA, es una destacada dirigente sindical de la Educación Pública de nuestra Provincia y también del país. Docente oriunda de Florencio Varela, cuenta con una destacada trayectoria en la defensa de la Educación Pública y los derechos de lxs Trabajadorxs de la Educación. Desde su rol en SUTEBA ha participado en discusiones claves sobre la infraestructura escolar, condiciones laborales y también en el ámbito paritario. A su vez, Silvia forma parte de la CTERA como Prosecretaria de Educación, ampliando su influencia a nivel nacional en asuntos educativos y sindicales.